Conecta con nosotros

Las bicicletas eléctricas también mejoran la salud

SALUD

Las bicicletas eléctricas también mejoran la salud

El Día Mundial de la Bicicleta se celebra en todo el mundo el 19 de abril con la finalidad de promover este medio de transporte, llamar la atención sobre los derechos de los ciclistas y destacar sus beneficios para la salud y la movilidad sostenible. Un estudio de 2016 asegura que las bicicletas eléctricas también mejoran la salud.



Qué son 

Las bicicletas eléctricas están equipadas con un motor eléctrico y una batería con una potencia de hasta 250W. Este motor solo funciona asistiendo al pedaleo -sin abandonar los pedales-  hasta una velocidad máxima de 25 km/h. Así, si no se pedalea o se alcanzan 25 km/h, el motor deja de funcionar. Este tipo de bicicletas son consideradas, a los efectos del Reglamento General de Vehículos y el Reglamento General de Circulación, como cualquier otra bicicleta, sin necesidad de matriculación, ni permiso de conducir, ni seguro de responsabilidad civil obligatorio. Las normas de circulación que les afectan son las mismas que para el resto de bicicletas.

Otros modelos de vehículos parecidos que superan los 25 km/h o cuyo motor puede funcionar mediante acelerador y sin necesidad de pedalear son considerados como ciclomotores con todas las consecuencias (matrícula, seguro y permiso de conducir).

Cómo funcionan

Es idéntica a las bicicletas tradicionales salvo que incluyen un motor eléctrico que ayuda en determinados momentos del pedaleo. No es como una pequeña motocicleta porque no sustituye la tracción humana, sino que funciona como ayuda en determinados momentos. El motor eléctrico se alimenta a través de una batería recargable que generalmente se aloja en el tubo transversal del cuadro de la bicicleta. En otros casos es exterior, colocándose donde iría la botella de agua. Tienen diferentes capacidades (de lo que depende la autonomía de nuestra bicicleta eléctrica), distintos pesos y materiales. las más recomendadas son las fabricadas en ion litio, que tienen una mayor durabilidad, menor peso y ocupan menos espacio que las tradicionales baterías de plomo.

Ventajas y desventajas

Entre las ventajas, las principales son que no hace falta estar en perfecta forma física ni ser un ciclista entrenado para vencer grandes distancias o fuertes pendientes. Además, permite recorrer kilómetros y kilómetros sin romper a sudar, eliminando la necesidad de duchas o vestuarios en el lugar de trabajo o estudio.

La mayor desventaja es el peso que la batería añade a la bicicleta, y que debemos mover con la fuerza de las piernas cuando no usamos asistencia al pedaleo. Actualmente se está trabajando para fabricar baterías de mayor duración y materiales más ligeros.

Mejoran la salud cardiovascular



Un estudio, realizado por la Universidad de Colorado Boulder y publicado en European Journal of Applied Physiology en 2016, se centra en los cambios producidos en el organismo de 20 personas sedentarias que pasan de utilizar una bicicleta eléctrica para moverse por la ciudad durante cuatro semanas, al menos 3 días a la semana y por un período de 40 minutos de duración. Estos voluntarios fueron sometidos a mediciones: consumo máximo de oxígeno, presión arterial, perfil de lípidos en sangre y prueba oral de tolerancia a la glucosa. Para el seguimiento mientras realizaron los viajes en bicicleta tuvieron que llevar puesto un monitor cardíaco y un GPS. Después de un mes los voluntarios volvieron a realizar un examen del estado de su salud. En este examen los investigadores comprobaron mejoras en la salud cardiovascular, incluido un aumento de la capacidad aeróbica y niveles más saludables de azúcar en sangre.

El estudio concluye que estas tres sesiones de 40 minutos a la semana, tres veces por semana en personas sedentarias sí mejoraron algunos de los factores de riesgo metabólico de los participantes, como el aumento de su consumo máximo de oxígeno. Además hizo que estas personas sedentarias tuvieraon mayor actividad física durante el día.

Más de SALUD

To Top